Conceptualismo matemático

Lona serigrafiada y acero. Junio-2001
Medidas: 150 x 300 cms la lona y 300 cms los cubos.

 

Ésta es una de las obras más interesantes, más completa y más explicada del primer libro que autoedité. Surge desde la contemplación de otra obra de Joseph Kosuth en el museo Guggenheim. en los primeros meses del 2001 y que pertenece a la colección Panza. La obra en cuestión son cinco prismas de cristal iguales; en cada uno de ellos pone un nombre diferente pero que guarda una característica de ese cubo de cristal. Esos cinco rótulos son: caja, cubo, vacío, claro y cristal. Entendí que esta obra era la contraria simétríca de Una y tres sillas. En ésta tres formas distintas son un mismo concepto, en la de la colección Panza una misma forma es cinco conceptos diferentes.
Además en ese tiempo estaba meditando sobre el antagonismo que existía y existe entre minimalismo y conceptualismo si nos remitimos a la forma y al contenido. Muchos movimientos han sido opuestos, han surgido por reacción y sin embargo comparten algunas semejanzas, algunos gustos. Sucede por ejemplo con el pop-art y el propio minimalismo.
En esta obra se muestra el antagonismo entre minimalismo y conceptualismo; también el que existe entre conceptualismo tradicional y el matemático, que no es el representado por esas obras cuyo desarrollo viene dado por sus datos matemáticos, sean fórmulas, sean dibujos de autocad, sean puntos en el espacio, sean coordenadas de planos, etc...Este conceptualismo matemático surge de la deducción y se basa en la relación de igualdad, de la tautología, que existe entre la aritmética y la geometría.
En el minimalismo muestro un cubo tridimensional, que forma parte del concepto cubo y que sustituiría a la silla tridimensional. Pero dilato la obra aprovechando someter al cubo a dos series de repetición. En una coloco el cubo en diferentes partes del espacio, como si se estuviera moviendo de izquierda a derecha; en la otra lo someto a un proceso desmaterializador, que también da sensación de movimiento.
En la parte conceptualista aprovecho la definición del diccionario para interpretar la palabra cubo. Además de la definición de cubo, derivada de la palabra cuba, está la que procede del griego: Kúbos. En esta definición se dice: Hexaedro regular// Que se puede expresar como producto de tres factores// Potencia de tres. Entendí que estas definiciones eran una sola. Si multiplicas un lado por sí mismo y lo vuelves a multiplicar por ese lado el resultado sería un hexaedro y una potencia de tres. Además sopesé la coincidencia y equivalencia entre aritmética y geometría.
De todo esto salió esta obra. En el libro abarca 15 páginas. En ellas muestro que aunque al conceptualismo no le interesa las formas, sólo los contenidos, paradójicamente estos contenidos se refieren sólo a la forma, como lo explico mediante un claro ejemplo. Pero aquí no me voy a extender demasiado porque se supone que estas ventanas son un avance de lo que dicen las obras. Si al espectador le interesa su explicación y desarrollo puede utilizar los formularios para hacérmelo saber y que esta obra u otra que crean con más méritos tengan el protagonismo mensual en el apartado de la página " Investigación artística"