La Clepsidra

Acero y barniz industrial. Mayo-2001
Medidas: 70 x 70 x 220 cms.

 


El título de Clepsidra o reloj de agua se debe a que en principio esta obra estuvo diseñada para ser vista en horizontal, de manera que era un ojo, un reloj en la pupila del ojo y una bomba; además, la estructura de esa bomba la llené de meridianos y paralelos y poblé en ellos el mapa de los continentes, es decir la bomba era a la vez la mismísima Tierra.
Esta acumulación de imágenes me pareció que mejoraba en su aspecto formal si colocaba la obra verticalmente. A cambio, la imagen del ojo se esfumó o menguó y aunque la imagen implícita del dolor y del llanto está subconsciente en la figura de la bomba, la ausencia del ojo la eclipsa parcialmente. Al desaparecer, disminuir o atenuarse el llanto, el título "clepsidra" perdía parte de su protagonismo, aunque quedara todavía el reloj con el puñal y la daga, no aparecía el líquido elemental de la clepsidra.
Es por eso que inventé una frase que acompañaba a la escultura para su interpretación. Dice así:
            "Las lágrimas de la humanidad son la materia elemental de la
            clepsidra que mide el tiempo universal"


La imagen de esta obra, agigantada al imaginar que la Tierra puede ser una gran bomba de relojería, se corresponde con la imagen agigantada de que la historia universal se pueda medir mediante las lágrimas vertidas en las tragedias.
Colocar una puñal y una daga curva, como un alfanje pequeño, es una simbología. El puñal representa Occidente, la daga Oriente. La verdad es que esta obra la hice antes del 11 de Septiembre del 2001. No recuerdo cuando la comencé, pero la terminé en Mayo de ese año. No es cuestión de ser vidente, sino de ser evidente. Cierto que en aquel tiempo había leído algunas cuartetas de Nostradamus pero también algunas prevenciones de Herbert Marcuse. Llegué a pensar que debe de ser realmente peligroso que una superpotencia económica y armamentística pierda su capacidad económica sin perder su capacidad de guerrear, porque aquello que no toma por las buenas, puede cogerlo por las malas. No sé si es exactamente el caso sucedido con Irak, pero no sólo es revelador que no hayan aparecido armas químicas, sino que antes de la invasión se dieron ciertos detalles delatadores. Recuerden las cartas con ántrax aparecidas en octubre del 2001, un mes más tarde del atentado de las torres gemelas. Algunos dijimos: Ya quieren implicar a Irak en la represalia. Después se supo que la bacteria del ántrax no estaba elaborada en ningún laboratorio irakí, ni ruso, ni de fuera de Estados Unidos, porque era de allí de donde había salido. Después de ese conocimiento, dejaron de aparecer cartas con ántrax. Dio lo mismo. Irak fue atacada. No se necesitó pretextos. En todo caso, es un ejemplo para explicar que hay muchos grupos de presión, muchos poderes fácticos y muchos asuntos que no salen a la luz, que pueden tal vez inducir a un gobierno a tomar ciertas decisiones.
De todas las maneras, no fueron estas razones detectivescas las que originaron la obra. Ya he dicho que surgió mucho antes. La idea sale poco después de la guerra en la antigua Yugoslavia, o en los momentos primeros de ella. Algunos pocos éramos contrarios a esa guerra, contrarios a la manera que se inició, contrarios al poco tiempo que dieron para la reflexión y para la discrepancia, y nos manifestamos físicamente en su contra. Esta guerra partía con un lema que contenía un lenguaje orweliano. El lema era "Razones humanitarias" . Últimamente todas las guerras de diseño vienen ya con su marketing, incluido el eslogan.


A mí, "Razones humanitarias" me pareció un típico ejemplo de lenguaje contradictorio que Orwell profetizó que había de darse y que lo escucharíamos con normalidad. Para mí esa frase indicaba mandar la ramita de olivo en un misil agresivo. La imagen era totalmente contradictoria; la frase atenuaba en parte esa contradicción.
Así que realicé el dibujo de la derecha y coloqué un texto de Herbert Marcuse insinuando que parecía que estuviésemos copiando el modelo de civilizaciones que entraron en decadencia. Decía así:
"En Atenas y en Roma las guerras exitosas, la creciente riqueza y el contacto con el lujo y con mayores comodidades de vida produjeron una aristocracia de la guerra y de la riqueza, que destruyó la república y causó la pérdida completa de la libertad política. El poder estatal cayó en manos de ciertos individuos y grupos privilegiados, mientras que la vasta masa de los ciudadanos perseguía sólo su interés privado, sin preocuparse por el bien común; el derecho a la seguridad de la propiedad se convirtió en su principal interés".

Parece que los ciudadanos no tengamos más preocupación que la seguridad de la propiedad y la de seguir nuestro interés privado. No sé si el poder estatal ha caído en manos de grupos privilegiados. La financiación electoral de Buhs por algunas compañías energéticas, según dicen, puede que les haya proporcionado algunas influencias en el poder.
Así que de esa imagen de un misil con la rama de olivo, de esa imagen contradictoria, creo que surgió la idea de esta bomba, diseñada originariamente en horizontal, que después cambié por la posición vertical. Añadir una daga oriental y un puñal era añadir una temor más, una probabilidad más, en este mundo desquiciado.